La zona verde de las piscinas es fundamental para aportar valor a nuestro espacio, no solo en un sentido estético, sino también a nivel de funcionalidad del espacio en general. Es por eso que es fundamental saber cómo cuidarla y mantenerla.
A la hora de construir una piscina es importante que el diseño se adapte de la mejor manera a los medios ambientales, con la asistencia de profesionales en el área, se logra añadir al proyecto especies cuyo mantenimiento involucre el menor gasto de recursos posible.
Es importante a la hora de diseñar zonas verdes, realizar un estudio completo del área, incluyendo el sistema de riego, la zona decorativa, qué tipo de mobiliaria será incluida, etc.
Las ventajas de mantener los jardines de nuestra piscina
Al contar con un constante mantenimiento, no solo de la piscina, sino también a nivel de jardinería, estamos añadiendo consecuencialmente una mejora a la imagen de nuestras instalaciones.
Cuidar nuestros jardines a su vez da beneficios para el mismo, ya que permite que exista un mayor crecimiento en la flora, de una manera sana y fuerte.
El agua de nuestra piscina también estará mucho más limpia si nos encargamos de cuidar sus alrededores, así evitaremos que hojas en descomposición la infecten y generen algas.
Como nos dicen desde niños, los parques, bosques, jardines y plantas en general son el pulmón de nuestro planeta. Mantener nuestras áreas verdes saludables contribuye mantener un aire fresco y limpio.
¿Cómo conservamos las plantas naturales y el césped?
La labor de mantener y conservar espacios verdes con plantas y especies vegetales debe ser continua, un trabajo activo que requiere constancia.
Aunque parezca inofensivo, una de los factores primordiales a tomar en cuenta es remover constantemente las hojas que se han caído de los árboles, ya que éstas se encuentran en estado de descomposición y podrían generar hongos.
El césped debe regarse con regularidad, pero no en exceso, ya que queremos evitar que esté demasiado húmedo. Para eso, es recomendable regarlo solo cuando no es período de lluvias, y preferiblemente durante horas de sol.
Es recomendado por expertos que el césped se corte en el periodo previo a las heladas, y que durante ésta época se riegue lo menos posible.
¿Y si no tengo tiempo para cuidar de mis áreas verdes?
La verdad es que sí requiere de un esfuerzo de tiempo y dinero el mantener un césped natural, por lo que muchas personas optan por la opción de instalar césped artificial en los alrededores de su piscina.
El césped artificial parece no necesitar ninguna atención a simple vista, pero como todo en esta vida, requiere un mínimo esfuerzo para mantenerse en perfectas condiciones.
Importantísimo conocer al enemigo de este tipo de césped, la humedad. Es de vital importancia asegurarnos de que el agua que llegue al suelo sea absorbida de forma apropiada por los sistemas de drenaje.
Para lograr que el agua se absorba eficazmente debemos cepillar la suciedad de nuestro césped, y utilizar fungicidas para prevenir que aparezca algún hongo.
A la hora de cepillarlo, debemos hacerlo en sentido contrario a cómo es la dirección de sus fibras, para asegurarnos de esa forma de levantar y deshacernos de toda la suciedad atrapada.
En el mercado se pueden encontrar perfumes higienizadores, que se encargan de evitar que los bichos se asienten y se generen bacterias. Se aplicaría de vez en cuando, y añadiría a su vez un olor a césped recién cortado.
No nos olvidemos de la piscina
Mantener una buena área de recreación y relajación requiere poner esfuerzo en todas las piezas que le componen. Ahora que sabemos cómo mantener nuestras zonas verdes, no podemos olvidarnos de nuestra piscina.
Hoy en día contamos con mucha tecnología nueva que hacen mucho más fácil y cómodo el mantenimiento de nuestras piscinas, con aparatos electrónicos especializados en limpiarlas y sustancias químicas que solo hay que verter para que realicen por si mismas el trabajo.
Un consejo para mantener el agua de nuestra piscina en las mejores condiciones es mantenerla en movimiento, ya que al evitar aguas estancadas podemos prevenir la proliferación de bacterias, y la aparición de hongos y algas.
Disfrutar de una piscina cuidada y con áreas verdes saludables nos garantiza momentos preciados de relajación y nos facilitará la carga de todo el estrés acumulado en nuestro día a día, cuídala como ella cuida de ti.